sábado, 23 de mayo de 2009

Poliladron


La televisión argentina siempre te estará en deuda. ¿Por qué? Porque, querido Gastón Portal, vos impusiste con habilidad mental (nunca una transpiración) un formato en nuestra excelsa TV argentina: los programas de archivo. La tele que habla de la tele. El predominio del refrito.

Corría el año 1994 cuando, a punto de parir una idea, hiciste que te tiraran abajo del primer 65 que venía tarde de Barracas para cortar con el esfuerzo de… imaginar. Y decimos “hiciste” porque tirarte solo implicaba, como mínimo, tener voluntad de algo.

Y eso, para vos, ya es laburar. Por ende, mejor pagarle a un par de enanos con poliomelitis para que hagan el trabajo sucio (o limpio, como sea, el tema siempre es que no lo hagas vos). De abajo de las ruedas del 65 fuiste a parar a la cama de tu casa. Y, embolado como estabas, clavaste la mirada en una pila de cassettes de tele que guardaba tu viejo –que en ese momento estaba desabrochándole la sotana al Padre Grassi, comentan por ahí–.

Ahí dijiste: “Uia, tanta cinta al pedo… ¿por qué no hago un programa con eso y fue?”. Claro que fue, negador de carretillas. De toque pusieron al aire el nefasto PNP (Perdona nuestros Pecados), con papá fascista en la conducción (no le había dado por la zoofilia todavía) y la boluda de Federica Pais a su derecha (como tenía que ser).

¿De qué se trataba el programa? Tapes y más tapes de otros programas. Y así vinieron largas temporadas de PNP, luego genialidades como El Ojo Cítrico (en donde además de los tapes te comías a la Prandi… que laburaba para vos, no sea cosa que te esguinces buscándote una mina aunque sea en otro barrio), RAN 15 y RSM (otra vez te comiste a la conductora, acalambrado).

¿De que trataban y tratan estos programas? Adivinen: de otros programas. El rating del refrito. No sea cosa que un día te tropieces con un lápiz y una hoja en blanco. Y se te ocurra algo Gastón! Nunca una pala, Portal.

Siempre te agradeceremos por las horas y horas de televisión que llenaste y llenás con tu archivo de mierda. Y como con esa porquería enlatada ocupaste y ocupás el lugar que le correspondía y corresponde a los que, en algún lugar, se rompen pensando algo nuevo. O tratan de aportarle algo a sus semejantes.

miércoles, 13 de mayo de 2009

Ova-cionado

Alcanzarle las pelotitas a su hermana, en un descascarado frontón de River Plate, fue el único esfuerzo que realizó –hasta el momento- el Ova Sabatini.

Igualmente, luego de semejante faena se iba al bar del club y se clavaba tremendas picadas junto a Guillermo Salatino, que por ese entonces, buscaba aquella posible revelación que lo saque de pobre.

Las malas lenguas señalan un confuso episodio ocurrido en el vestuario de hombres entre Guille y Ova como un punto de inflexión en la vida del hermano de la reconocida ex tenista. En resumen, Ova aprendió que a veces hay que “romperse el culo” para trabajar.

Desde aquel momento, el joven Sabatini demostró una aversión al trabajo sin precedentes. Cual parásito aplicado, primero se prendió de las polleras de su hermana –que bastante transpiradas estaban- para luego colgarse del escote de la pareja de Fernando Carrillo (otro que merecerá en breve un post en este humilde blog).

La Fulop hizo de todo para que el Ova agarre una pala. Pero, como decían en mi barrio “es al pedo empujar cuando el miembro es corto”. En efecto, el único trabajo que se recuerda del Ova es su tristísima actuación en la Banda del Golden Rocket como “7 bien abierto" en el equipo blanco y rojo:


miércoles, 6 de mayo de 2009

Mínimo una pinza de depilar...

... deberías conocer. Nacha querida, en tu vida viste un alicate... qué te vamos a hablar de martillos, clavos y serruchos. Ahora resulta que sos peronista. Obrera. Cuando lo más pesado que levantaste fue la caja de tu disco Heavy Tango, para alcanzárselo a los basureros de Manliba...
Nunca una azada, Nacha. Y de pronto te volviste la zarina de los desposeídos. Otra que se quemó cuando se disfrazó de Evita...
Ay Nacha... no sabés lo que es el puloil, pero en un par de semanas te vas a transformar en la heroína del corte y confección. Y aprenderás a entregar chapas.
Pero nunca a clavarlas para que no se vuelen...

De no transpirar se trata

Bienvenidos, queridos amigos. Este es un espacio en el que -juntos- daremos cuenta de la trayectoria de una serie de especímenes hermanados por un mismo comportamiento: la alergia a la pala o cualquier otro elemento capaz de generar algún tipo de esfuerzo.
Inútiles, parásitos, basuras, lacras, forros de turno, piolas y ventajeros de todo tipo tendrán en este espacio su lugar.
A través del aporte de todos ustedes, claro, porque a esta gentuza le hablás de laburo y ni se arriman a un teclado.
En la inauguración, nuestro querido Fabián Doman. Tuvimos que ponerlo a la derecha. Obvio.
Según el mismo dice (quien sino...) "trabajó (jajaja, perdón!) en las redacciones de Ámbito Financiero y BAE, condujo programas políticos - económicos en PyE, CVN, Canal 26 y fue corresponsal de Radio 10 en los EEUU".
Te faltó contar cuando te las dabas de panelista serio (jajaja, perdón!) en Bendita TV, el programa conducido por el de pronto "tipo con onda" Beto Casella (otro gambeteador de martillos y carretillas).
Hay más pero la emoción impide seguir adelante. Siempre con esa cara simpaticona, de yerno amable que por atrás busca quedarse con la escritura de la casa de su madre.
Para después gastarse todo en consultas vinculadas con un reiterado problema de gases.
Un día defendés a Clarín. Otro, a la contra. Todo sin saber escribir ni tu apellido o dar vuelta un cassette TDK de 60. Podés subirte a un chevrolet y a un Ford sin que se mueva una ceja. Lo importante es salir a las pistas. Sin transpirar demasiado, claro.
Nunca una pala, Doman. Bienvenido y bienvenidos!!